En un escenario de pesadillas
Paul Matthews, un desventurado padre de familia, ve cómo su vida da un vuelco cuando millones de extraños empiezan a verlo en sueños. Pero cuando sus apariciones nocturnas toman un giro de pesadilla, Paul se ve obligado a navegar por su nueva fama.
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Por Gastón Dufour
El hombre de los sueños es un drama que a primera vista parece una comedia negra. Por supuesto que la carta que ayuda al acercamiento es el tremendo protagónico con el que se despacha Nicolas Cage en la piel de Paul Matthews, quien sin lugar a dudas se encuentra en su pico más alto en lo que tiene que ver con la calidad interpretativa en los papeles que le toca abordar.
Pese a que durante un tiempo el actor llegaba a los portales de noticias por situaciones de apremio económico debido a los que debía aceptar cualquier proyecto que le pudiera llegar, todo eso quedó afortunadamente atrás y su presente dice todo lo contrario. No solamente reafirma todo lo que puede dar (y lo que ya aportó en las décadas anteriores) para hacer honor a su estirpe. Cada film en que participa es un éxito rotundo.
Y ese es por supuesto también el caso de El hombre de los sueños. Lo que parece una simplificación morbosamente risueña de la vida de un hombre apocado y con una vida bastante gris, se vuelve con el pasar de los minutos en un drama con tintes filosóficos que escapa a la oscuridad con la intervención de la mueca de la broma, en algunos pasaje, bastante macabra.
Suelo decir que algunos personajes (y guiones) solamente pueden recaer en determinados actores con características especiales. Así es que el dinamismo, la sorpresa, la actitud de Cage lo hacen la figura más consistente para un rol que requiere una ductilidad expresiva de altísimo nivel.
Ciertos fragmentos me recordaron a El ladrón de orquídeas. De verdad por ese entonces la jugada narrativa y estilística de Spike Jonze fue perfecta y pocos se animaron como él lo hizo en toda su obra en el marco del cine hollywoodense.
Así el director noruego Kristoffer Borgli toma elementos de inspiración general sin olvidar un tema que como es el de la fama y sus males derivados, que si bien decir que lo obsesiona puede ser un montón, es justo conceder que le interesa lo suficiente como para tratarlo una y otra vez en sus films Energizate con Drib (2017) y Enferma de mí (2022).
Julianne Nicholson como Janet, la esposa del agobiado profesor en esta historia definitivamente surrealista (palabra que seguramente no faltará en ninguna reseña al respecto), logra un tono excelente. Nada menos que a lo que nos tiene acostumbrados. La trivialidad anodina de la vida en pareja los ha ido apagando poco a poco pese a pequeños gestos, y eso se acentúa con la aparición de Paul.
A tal punto los efectos de la broma irónica en la que el sorpresivo resplandor social lo arrastra, que hasta la ingeniosa producción de fotos para una revista a la que lo someten se asoma como la puerta que se abre a los impactos inesperados y simbólicos de la cancelación.
El guion, también a cargo del realizador, direcciona la historia a buen puerto y la sorpresa a lo largo de su duración no olvida los detalles que convierten a Dream scenario, tal el título original del film, en el punto más alto hasta nuevo aviso en la carrera del realizador europeo.
TÍTULO: El hombre de los sueños
TÍTULO ORIGINAL: Dream scenario
DIRECCIÓN: Kristoffer Borgli.
ACTORES: Nicolas Cage, Julianne Nicholson, Lily Bird.
GÉNERO: Comedia.
ORIGEN: Estados Unidos.
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