
El instinto, otra vez
Cinco años después de los acontecimientos de Jurassic World: Dominio, la ecología del planeta se ha vuelto inhóspita para los dinosaurios. Los que quedan, viven en entornos ecuatoriales aislados con climas semejantes al de los lugares donde alguna vez prosperaron. Las tres criaturas más colosales de la tierra, el mar y el aire dentro de esa biosfera tropical poseen, en su ADN, la clave para un medicamento que aportará a la humanidad milagrosos beneficios para salvar vidas.

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Por Gastón Dufour
La franquicia jurásica sobrevive, y no por nostalgia. Jurassic World: Renace, dirigida por Gareth Edwards y protagonizada por Scarlett Johansson, llega para restablecer el pulso de una saga que parecía haber perdido su ADN emocional. Con producción de Frank Marshall y Steven Spielberg como productor ejecutivo, la película apuesta por el cambio sin dinamitar lo anterior. En adelante, posibles spoilers.
La trama se ubica en una nueva isla, Saint‑Hubert, donde solo quedan tres especies de dinosaurios. Lo que parece una misión científica encabezada por Zora Bennett (Johansson) pronto se convierte en una expedición de supervivencia: fallan los protocolos, aparece una familia civil atrapada, y el instinto se vuelve el único guía. El guion de David Koepp respeta los ritmos clásicos, pero agrega tensión interna: no es solo correr de un monstruo, es enfrentarse a la idea misma del monstruo.
Johansson, Mahershala Ali y Jonathan Bailey integran un trío protagónico que funciona desde la contención, y al que se suma Manuel García Rulfo en un papel que intenta ser sustancial pero es menor frente a los personajes “de color” que trae adosados a él.
No hay chistes sobrantes ni discursos inflados: hay decisiones, miradas, resistencia. La dinámica entre ellos, sobre todo cuando el miedo impone sus reglas, construye un vínculo que se siente más físico que sentimental. El regreso de Koepp como guionista aporta una línea conductora: no hay discursos grandilocuentes sobre ciencia o futuro, sino silencios que preceden al ataque.
Gareth Edwards filma con escala y control. Los nuevos dinosaurios —el Titanosaurus, el Mutadon y el Quetzalcoatlus, entre otros— se integran al paisaje con crudeza. No son decorado, son amenaza. La cámara evita el efectismo gratuito y privilegia la tensión del fuera de campo. Lo que se ve, impresiona; lo que no se ve, también. ¿Les suena eso de algún lado?
El tramo final baja la intensidad y recurre a una resolución que no sorprende. Pero incluso así, Renace se las arregla para sostener el viaje. No por lo que concluye, sino por lo que despierta: el deseo de volver a entrar, una vez más, al territorio donde el control es solo una ilusión.
TÍTULO: Jurassic World: Renace
TÍTULO ORIGINAL: Jurassic World: Rebirth
DIRECCIÓN: Gareth Edwards.
ELENCO: Scarlett Johansson, Mahershala Ali, Jonathan Bailey, Rupert Friend.
GÉNERO: Ciencia Ficción. Aventuras. Acción.
ORIGEN: Estados Unidos.
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