El crimen no paga
Una periodista investiga el caso de Anna Delvey, la mujer que convenció a la élite de Nueva York de que era una heredera alemana y una gran empresaria. Pero detrás de todo este glamur se encontraba un estafadora audaz.
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Por Rodrigo Vega
En un año donde veremos varias series sobre estafadores como The Dropout sobre Elizabeth Holmes y We Crashed sobre Adam y Rebekah Neumann con el escándalo de WeWork, llega Inventing Anna. La serie creada por Shonda Rhimes (Bridgerton; Grey´s Anatomy; Scandal) cuenta con 9 episodios donde se cubre la historia de Anna, tomando como referencia el artículo que la expuso, “How Anna Delvey Tricked New York’s Party People», por Jessica Pressler.
Anna Sorokin estafó a muchos, pero cayó por dos motivos: su estafa a una amiga con un viaje a Marruecos que devino en la presentación de cargos; y principalmente su estafa a bancos para financiar un club de arte con su nombre: The Anna Delvey Foundation.
Protagonizada por Julia Garner como Anna; Anna Chlumsky como la periodista que la investiga; y un elenco redondeado por Katie Lowes como Rachel; Laverne Cox como Kacy Duke; y Alexis Floyd como Neff, todos personajes que existieron en la historia de Delvey, la cual fue tan efectiva en papel, pero que encuentra dificultades varias para su adaptación. Comenzando por el enfoque del estilo como una forma de vida para Anna, cuando ella misma contó que su motivación era otra. La duración de los episodios genera cierta flacidez en la narración y lo mismo ocurre con una estructura que cambia el enfoque en cada capítulo, utilizando flashbacks antes de llegar al juicio y sus escándalos.
El centro de la trama es la relación entre Vivian y Anna, cuando las estafas han alcanzado a su perpetradora y tienen varias entrevistas en prisión. Pero allí también notamos como las escenas sobre Anna son superiores y más interesantes que el desarrollo del personaje de la entrevistadora y sus dramas cotidianos.
Su historia fue difícil de descifrar, debido a que muchos herederos ricos que la conocieron y sufrieron pequeñas estafas se negaron a discutirlo públicamente. Por lo tanto, las licencias creativas son comprensibles. Sin embargo, el resultado final donde no se escatima en detalles e historias, confunde al público casual que no ha seguido la historia de Delvey.
Mientras, tanto la propia Anna continúa escribiendo capítulos de su historia, con una carta escrita desde la prisión Albion Correctional Facility, publicada este mes vía su abogado, donde nos cuenta que está siendo retenida por inmigración y aguarda su deportación de los Estados Unidos, con críticas varias al sistema judicial de USA que la considera más peligrosa que a criminales con cargos más graves. Y por eso le han demorado los tramites a propósito.
Inventing Anna es una serie que cumple en traer la historia de una inverosímil mente maestra, cuyos crímenes expusieron la frivolidad de una ciudad donde la cuenta bancaria es clave para lograr una impresión.
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