16 de abril de 2024

La película de Matti Geschonneck se basa en la conferencia de Wannsee

Durante la Segunda Guerra Mundial, altos funcionarios del nazismo se reúnen en la ciudad del suroeste de Berlín para determinar los pasos a seguir con respecto a la matanza de judíos. Crudo retrato a los debates y discursos sobre una de las reuniones más oscuras de la historia.


Por Ignacio Pedraza

Nuevamente el cine se posiciona como un espacio para la memoria y el trabajo histórico que lleva a la pantalla grande sucesos que permiten al espectador tanto conocer más de vertientes no tan presentes como representar de manera ficcional hechos que resultan imposibles imaginarlas en nuestro mundo. En este caso, La conferencia (Die Wannseekonferenz, 2022) nos exhibe otro espacio de la Segunda Guerra Mundial.

Sin necesidad de mostrar muerte, sangre o simplemente armamento, la trama se sitúa en 1942, más precisamente el 20 de enero de dicho año donde se desarrolló la reconocida Conferencia de Wannsee, donde diferentes dirigentes de la organización Schuftzstaffel debatieron con respecto a la Solución Final a la cuestión judía que, como indica el nombre del siniestro plan, implicaba la exterminación de la colectividad pero replanteándose las formas de llevarlo a cabo.

Para este caso, el director Matti Geschonneck junto a los guionistas Magnus Vattrodt y Paul Mommertz deciden revisar de manera precisa y cruda cómo se llevó adelante la reunión planteada por Reinhard Heydrich (Philipp Hochmair), convocando a altos funcionarios del nazismo para marcar las líneas de acción y abrir el debate sobre los métodos. En la casona de la ciudad alemana se hicieron presentes dirigentes de diversos ministerios, como la de Relaciones Exteriores, Propaganda, Justicia; entre otros, que si bien defendían los principios de Hitler también cuestionaban sus propios intereses y formas de llevarlo adelante.

Acá no hay musicalización para acompañar, ni ningún tipo de doble sentido o sátira para retratar a estos personajes como pudimos ver en otros casos –y mucho menos una contextualización sobre los reunidos-, sino que el tono resulta sobrio, rozando aspectos documentales ya que solo se hace énfasis en lo discutido a lo largo de las horas que dura la conferencia para poder visualizar los beneficios buscados por cada uno de ellos.


La película comienza de manera directa en Wannsee y nunca va a salir de allí, al igual que sus actores que ingresan y salen de escena en tono teatral. Lo más enriquecedor del film pasa por evidenciar algo tan atroz solo con diálogos y protocolos; con las referencias hacia el pueblo judío, los números que manejaban, tanto sus “ideales” como los del partido y un climax que deja estupefacto cuando se nombra Auschwitz como ejemplo.

Con un matiz que puede ser cansino para aquel que necesita movimientos en los intérpretes, La conferencia resulta interesante para aquellos fanáticos de los sucesos históricos y que disfruten más de las discusiones que la acción en sí, más allá de la temática deplorable y siniestra pero lamentablemente real que formó parte de nuestra historia.



El 20 de enero de 1942, destacados representantes del régimen nazi alemán se reunieron en una villa de Berlín-Wannsee para una reunión que pasó a la historia como la Conferencia de Wannsee, en la que se decidió el asesinato sistemático de 11 millones de judíos.

TÍTULO: La conferencia
TÍTULO ORIGINAL: The Conference
GÉNERO: Histórica. Drama. Bélica.
ORIGEN: Alemania.

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