Psicoanalizar con humor a un país
Selma es psicoanalista y, tras volver a su Túnez natal para abrir un consultorio, se encuentra con que va a tratar con una variopinta lista de pacientes.
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Por Gastón Dufour
Asuntos de diván es el primer largometraje de la directora Manele Labidi, quien también estuvo a cargo del guion, y en su trabajo debutante los logros son marcados. La figura principal de la historia logra una imagen de madurez para su personaje y para todo el film, esquivando las obviedades y los lugares comunes.
La creadora de origen franco-tunecina, quien tuvo un paso más o menos relevante por ocupaciones en principio muy diferentes a la pasión creativa cinematográfica (considerando que estudió Ciencias Políticas y Económicas y trabajó en el mundo de las finanzas), genera una obra que funciona en más de un aspecto.
Con una transición hacia las cuestiones sociales y políticas, el formato de comedia resuelve las cuestiones de la protagonista y la cercanía con lo que la historia propone. Pese a que parece no arriesgar demasiado en su construcción, Asuntos de diván juega con los personajes un juego que los pone a bailar en un tono desenfadado sobre la propia realidad y la de quienes los rodean.
En el nuevo camino en el que despliega su autenticidad, sus planes, sus anhelos, la profesional tiene un punto de unión con el país en el que vivió (Francia) y el regreso a su tierra natal, un punto que efectivamente la moviliza.
Lo sorprendente de la obra radica en cómo la protagonista, Selma, se muestra como una extraña en su propio país. Su vestimenta, tatuajes y modos de comportarse reflejan claramente la distancia temporal y la ausencia que marcaron su evolución hacia un «nuevo yo».
El intento de vinculación de la figura que se presenta como una extraña gira en novedosa posibilidad al momento de incorporar a nuevas personas a a su círculo de interacción social, en los diferentes espacios en los que vivencia sus experiencias.
Estos detalles subrayan su proceso de transformación y su búsqueda de identidad, lo que resulta en conflictos internos que resplandecen con fuerza cada vez que se enfrenta al complejo entorno que dejó atrás.
En resumen, Asuntos de diván destaca por su frescura, humor y autenticidad al representar los conflictos internos de su protagonista. Labidi logra en su debut cinematográfico una mirada inteligente y sensible hacia la vida de aquellos que se debaten entre dos mundos. La película es una prometedora muestra de su talento como directora y guionista, ofreciendo una experiencia cinematográfica que cautiva y conmueve al espectador.
TÍTULO: Asuntos de diván
TÍTULO ORIGINAL: Un divan á Tunis (Arab Blues)
DIRECCIÓN Y GUION: Manele Labidi
MÚSICA: Flemming Nordkrog
FOTOGRAFÍA: Laurent Brunet
GÉNERO: Comedia. DramA.
PAÍS: Francia
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