En sesión de terapia
Beau es un hombre que tendrá que enfrentarse a sus miedos y paranoias al aventurarse en una épica odisea para llegar a casa de su controladora madre.
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Por Sebastián Arismendi
Luego de cuatro años sin estrenar una película regresa Ari Aster. El director estadounidense conocido por films como El legado del diablo (Hereditary, 2018) o Midsommar (2019) y por trabajar con la productora A24, se hizo esperar y esa espera incrementó la expectativa sobre su nueva entrega: Beau tiene miedo, protagonizada por el gran Joaquin Phoenix. Se entiende que hubo una pandemia entre medio, pero también dificultades creativas que hizo extender la premiere. ¿Valió la pena?
Beau (Phoenix) es un hombre soltero cercano que ya pasó los cuarenta, farmacodependiente, atormentado y con mommy issues. Una visita para ver a su madre luego de un largo tiempo hará crecer la ansiedad en Beau, esto lo dirigirá a un bucle de pesadillas de la cual no podrá escapar.
La premisa de lo nuevo de Aster deriva de un cortometraje homónimo de siete minutos estrenado en 2011, por lo que se puede decir que la idea no es nueva sino repotenciada y ampliada. Se puede extraer de la misma los temas relacionados como la interpretación de los sueños, el complejo de Edipo, la represión de la sexualidad, las fobias y el pasado; todo esto es claramente freudiano, es lo que está a simple interpretación, al menos es lo que se cree pues, el joven director hace más espeso más el caldo narrativo.
La película cuenta con una duración de 179 minutos, casi tres horas en las que el espectador será sometido a prueba, no solo a su paciencia sino a su capacidad de entender qué está pasando. La primera hora funciona de maravilla, la tensión no cesa a pesar de no saber hacia donde se dirige; la segunda se vuelve una rara comedia incómoda con momentos cringe y luego oníricos, se dirige hacia lo teatral y onírico; la última parte es interesante, aunque no convincente: si bien es el enfrentamiento de Beau con sus miedos y lo que puede ser el final de su pesadilla, pierde sustancia cuando el bote de Ari Aster choca con todos nosotros.
Las experiencias de la película son la incomodidad, esta vuelve colectiva ya que va de butaca en butaca, hay risas que la acompañan comentarios silenciosos y también hay instantes donde el espectador se rinde y decide mirar el teléfono, es allí donde lo pierde y es muy difícil volver a conectarlo con el producto. El mayor pecado del realizador fue pensar en sí mismo más que las reacciones de su público.
Una de las teorías que sostiene la recepción mixta del film es la mezcla de géneros. Si bien la comedia funciona en ciertas películas de terror, en esta es anticlimática pues la hace autoparodia, nos hace pensar que es una tomadura de pelo y que estamos viendo una entrega oscura de The Truman Show.
Beau tiene miedo es una pesadilla en todo sentido, otra muestra del cine de Ari Aster y su reflejo sobre las relaciones familiares, y para quienes estamos siguiendo la filmografía del director, esto nos hace preguntar: ¿Todo bien en casa?
TÍTULO: Beau tiene miedo
TÍTULO ORIGINA: Beau is Afraid
DIRECCIÓN: Ari Aster
ELENCO: Ari Aster with Joaquin Phoenix, Nathan Lane, Amy Ryan, Kylie
Rogers, Armen Nahapetian, Patti Lupone.
GUION: Ari Aster
GÉNERO: Terror psicológico. Comedia. Horror
ORIGEN: Estados Unidos
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